Colegio salesiano

Elegir un colegio para nuestros hijos es una tarea muy difícil, especialmente porque cada institución le transmitirá valores que a veces estarán de acuerdo, pero otras no concordarán con los nuestros, y tal vez estaban explícitos pero no nos tomamos el tiempo de averiguarlos, pues no creímos que era importante. Muchas veces decidimos optar por un colegio tomando en cuenta su disciplina, el esmero puesto por sus directivos y el cuerpo docente, la manera de concretar el proceso de enseñanza aprendizaje, etcétera, pero no tomamos en cuenta su ideología, que influirá decididamente e la formación integral de nuestros niños y jóvenes.

Una buena opción puede ser un colegio salesiano. Mandar a un niño a un colegio salesiano es mucho más que un lugar para aprender las asignaturas del currículum, importa adherir al ideario de Don Bosco (1815-1888) fundador de la Congregación Salesiana, llamada así en homenaje a Francisco de Sales, obispo ginebrino; preocupado por la educación de los jóvenes en situación de riesgo social, como medio de prevención basándose en la religión, el desarrollo de la capacidad racional y en el amor, siendo el objetivo de la formación salesiana educar los jóvenes espíritus en el cristianismo, el amor a la patria y la honradez como camino de santificación, integrando a las familias en la educación formal, tratando de que aprendan un oficio, pero además, un modo saludable de vivir.

El ambiente escolar es familiar, abierto, libre, solidario, de respeto mutuo, tratando que se desarrolle en armonía y alegría, sintiendo regocijo por las cosas simples y cotidianas, con respeto hacia creencias religiosas diferentes. Se trata de desarrollar la mente, el cuerpo a través del deporte, y el alma.