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Inteligencia y creatividad

Publicado por Hilda Fingermann

Inteligencia y creatividadCon la información que contamos y con la que vamos adquiriendo, vamos conociendo la realidad, lo que nos sirve para contar con recursos, tanto a nivel individual como social. Con lo que sabemos podemos participar de una conversación, enseñar a otros, analizar documentos, interpretar un contrato, etcétera; pero también podemos aplicar ese conjunto de saberes para crear situaciones nuevas, originales, modificando lo que hasta entonces se sabía, dándole una nueva configuración u otros usos o aplicaciones. El pensamiento creativo es una habilidad mental, un modo de pensar divergente, que requiere que el conocimiento ingresado en la estructura cognitiva, lo haya sido de modo significativo, para poder establecer entre esos conocimientos previos, conexiones y relaciones válidas, para llegar a un producto original.

Cuando surge un problema algunos tienden a resolverlo de acuerdo a esquemas prefijados, y otros, los creativos, buscan nuevos caminos, y por lo tanto, al innovar, crean. También se puede crear un nuevo problema, y luego buscarle un modo de resolverlo. Según Guilford, lo que importa para saber si alguien tiene creatividad es la producción de divergencia (no solucionar problemas por los carriles convencionales, sino elegir nuevas alternativas) que es un de las cinco operaciones que realiza el intelecto.

Por lo tanto, para crear, se necesita ser flexible, y animarse al cambio, usando la imaginación (para apartarse de lo que siempre se hizo) y la razón (para que lo imaginado no resulte descabellado).

Para ser creativo se necesita tener confianza en sus propias posibilidades, lo que requiere por lo tanto poseer inteligencia emocional; ser imaginativo, intuitivo, no convencional, animarse al desafío y tolerar las frustaciones, pues no siempre el resultado será el deseado. Lo importante es no desanimarse e intentarlo de nuevo. Por supuesto, hay personas que simplemente son intrépidas, y prueban soluciones nuevas, pero que están condenadas al fracaso desde el inicio, pues son medios evidentemente inviables, esto no es creatividad, pues aunque no se logre lo esperado, lo aplicado debe tener fundamento y lógica.

Los test tradicionales o psicométricos de inteligencia no suelen medir la creatividad, pues ésta hace más a la sensibilidad de la persona y a un rasgo de su personalidad. Los test para medir el grado de creatividad son específicos. Binet creador de los test de medición de inteligencia trató de medir la creatividad, incluyendo en sus test un manchón de tinta, para que los sujetos valorados mediante el test, dijeran lo que ven, pero la medición de esto era muy dificultosa.

La creatividad suele manifestarse en las producciones artísticas o en la invención científica.