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Kant y la educación

Publicado por Hilda Fingermann

El filósofo prusiano y querido profesor universitario Immanuel Kant (1724-1804) era ordenado, complejo, metódico, brillante intelectual y moralmente, representante del pensamiento ilustrado y admirador de Rousseau. Concebía a la educación como un arte para transmitir la cultura acumulada a través del tiempo, producto de la construcción social, y para disciplinar los rasgos instintivos de la personalidad, cuyo fin era perfeccionar al educando. Sus ideas sobre educación están contenidas en el libro “Pedagogía” que publicó en el año 1803.

Es por ello entonces que la educación, es una de las principales responsabilidades sociales a cargo de los más capaces intelectual y moralmente considerados, y se integra con los cuidados que deben proporcionarse en cuanto a su manutención y sustento (del cuerpo y del alma), con la transmisión de contenidos (aspecto positivo) y con la represión a los instintos caprichosos por medio de una planificación de conductas (aspecto negativo de la educación, ya que borra el instinto animal) a través de la razón.

El uso de la coacción solo debe emplearse como medio para ser libre, pues hace que el individuo de la especie humana, con capacidades naturales a desarrollar y perfeccionar (pues no nace con una moral impuesta) se transforme en un hombre, lo que no es una condición adquirida en forma natural como en el resto de los animales, sino que necesita para desplegarse como persona, del proceso de educación (para iluminar sus mentes) que le brinda los medios para satisfacer sus propias necesidades y completarse como ser humano.

Lo que se espera del educando es que llegue a convertirse en un ser autónomo, que decida en forma racional y responsable, conforme al deber moral, haciendo lo que se debe y no lo que se quiere por gusto personal, para hacer buen uso de su libertad; constituyéndose la educación como un deber moral, para contribuir a que la especie alcance su desarrollo ideal hacia el bien.

El ser humano es el único ser del reino animal susceptible de educarse, pues los animales se entrenan. La educación comprende tres aspectos ordenados secuencialmente, ya que uno va preparando al otro: el físico, el intelectual y el moral.

La perfección educativa, se va logrando por etapas generacionales, en forma paulatina, con esfuerzo, para llevar a los humanos hacia su destino de modo progresivo, aprovechando lo acumulado hasta entonces, y adicionando mayor perfección. Así se van enseñando contenido inculcando valores, que no son innatos sino aprendidos (solo se nace con una potencialidad, una predisposición hacia ellos).

Fue partidario de la educación pública, experimental y práctica; y de que la inclusión de contenidos en los currículos debe hacerse conforme a un motivo, que conduzca al fin de la educación: la perfección del hombre.