Colegios de Alto Rendimiento
Los Colegios de Alto Rendimiento son aquellos que se ocupan de brindar atención especializada a alumnos destacados en cuanto a sus potencialidades y rendimiento, para que estas cualidades sean potenciadas. La estimulación a través de estrategias especialmente diseñadas a tal fin, le ofrece a estos estudiantes la posibilidad de acentuar aún más sus habilidades, y no permanecer en aulas donde el nivel de sus compañeros no permite al docente avanzar de una manera demasiada rápida o con aumentos vertiginosos de complejidad, que es lo que estos niños prefieren, ya que de lo contrario se aburren y molestan, lo que en ocasiones lleva a que se los confunda con educandos de conducta inadaptada al ámbito escolar.
El objetivo de estas instituciones educativas es formar personas íntegras a nivel académico pero también físico y artístico, aprovechando sus aptitudes naturales y guiándolas a su pleno desarrollo, dándoles una oportunidad de adquirir una educación de calidad extraordinaria a niños que tal vez no tengan los recursos económicos para pagarlos.
El equipo docente se integra con profesionales calificados a quienes además se brinda capacitación constante.
En Perú, en diversas regiones, y en un total de 22, funcionan estos colegios, que se han creado para atender las necesidades especiales de alumnos de escuelas públicas, de hasta 15 años a su ingreso, de tercero a quinto grado del nivel secundario, que se han destacado al obtener los mejores promedios (superiores a 15.00) ocupando en el segundo grado de secundario uno de los tres mejores puestos o haber obtenido el honor ser ganador en concursos nacionales del Ministerio de Educación en un período comprendido en los dos años anteriores a su postulación para el Colegio de Alto Rendimiento. Luego se les realiza una evaluación integral. El mérito es el que determina el ingreso en este sistema especial de formación que asegura en general, un futuro alentador.
Quienes los critican sostienen que al estar estos colegios destinados solo a alumnos sobresalientes, se discrimina al resto que tal vez se ha esforzado y ha quedado por ejemplo en un cuarto o quinto puesto, y que entonces no gozará de educación de calidad, simplemente porque hubo otros mejores, pero no porque ellos no hubieran podido aprender con eficacia en esos colegios modelo. Otro problema es que el “talento” de los niños se mide de acuerdo a ciertos conocimientos considerados valiosos, pero tal vez otros niños tengan otras inteligencias distintas, de acuerdo a la teoría de las inteligencias múltiples, también muy dignas de reforzar.