Diseño curricular diversificado
La política educativa de inclusión, debe ir acompañada de un currículum diversificado para que pueda ser efectiva en la práctica y no una mera utopía. El diseño curricular en Argentina debe hacerse de acuerdo a los contenidos mínimos prescriptivos fijados a nivel nacional para asegurar que todos los niños y adolescentes reciban una similar calidad educativa y favorecer la movilidad dentro del sistema.
Sin embargo, el currículum debe ser flexible y adaptarse a las diferentes situaciones que impidan cumplimentarlo de manera rígida, ya sea por exceso, por defecto o por necesitar algún tipo de diferenciación contextual, debido a la interculturalidad ya sea lingüística, étnica, social, familiar o individual, en virtud del respeto a la diversidad.
El currículum prescriptivo básico debe respetarse en la medida de lo posible, y modificarlo en cuanto la necesidad lo exija en vistas a lograr la máxima equidad, desvirtuando lo menos posible la calidad, por lo cual debe hacerse de modo responsable, creativo y comprometido, ya que no se trata de bajar los contenidos de tal modo que el aluno apruebe sin aprender nada, sino que se supere gradualmente hasta alcanzar el desarrollo de su máximo potencial, respetando sus particularidades individuales o sociales y la interculturalidad, que en muchos casos pueden implicar enseñar más que lo prescripto, si el alumno posee una madurez superior o respetar el idioma que habla el alumno en su contexto familiar, si es la lengua autóctona, aunque incorporando el idioma oficial.
Se trata por lo tanto de enriquecer el diseño curricular prescriptivo, adecuándolo a la realidad del aula
La ley de Educación en Argentina contiene varios artículos al respecto. Por ejemplo, en el artículo 86, faculta tanto a las Provincias como a la ciudad de Buenos Aires para crear dentro del marco legal sus propios proyectos curriculares en consonancia con sus respectivas realidades.
El artículo 93 trata de de la organización de programas para detectar capacidades o talentos especiales, y en consecuencia, ampliar o flexibilizar la escolarización.
El artículo 123 en su inciso h, establece entre los criterios generales que deben fijarse desde el Consejo Federal de Educación para organizar las escuelas, la realización de las adecuaciones curriculares que sean necesarias dentro de los lineamientos generales, con el fin de responder a las necesidades particulares de los educandos y su entorno.