Dinámicas para niños de primaria
En la escuela primaria son sumamente útiles estas actividades que tienden a lograr en los educandos, mayor motivación, más confianza en sí mismos y en los demás, sentir a la escuela como un sito agradable y del cual se es parte, teniendo en cuenta que los niños deben aprender a gozar de su aprendizaje, pues aún no están en edad de someterse a fuertes presiones sociales. La escuela es una institución cultural, no natural. El pequeño naturalmente desea jugar, y someterse a normas y crear hábitos, es una tarea que debe ir adquiriendo paulatinamente, sin sentirlos como una carga, para que luego sí, al internalizarlos, pueda desempeñarse con responsabilidad dentro de los grupos sociales en los que deba actuar. Es el aprendizaje lúdico o a través del juego.
Formar equipos de juegos con contenido didáctico, puede enseñarles a pensar, en la resolución del problema planteado, pero además, en su sentido de pertenencia, en el aporte de cada uno al conjunto, estimulando la cooperación y la solidaridad. No es necesario, y es aconsejable, que se juegue por el placer de hacerlo, y no para ganar. Los equipos no deben verse como rivales, sino como grupos circunstanciales, que no deben ser rígidos, sino que es preciso variar sus integrantes, para no fomentar la división de la clase, sino su integración.
Aprender con la mente, acompañándose del cuerpo, hace que la tarea sea vista como algo más divertido y reconfortante, aunque siempre poniendo límites, para que no se genere un caos. Si esto ocurre, a no desesperarse, será una buena oportunidad para que entiendan con un ejemplo concreto, para qué existen las normas que impiden hacer lo que cada uno quiere sin importar los derechos de otros, y el bienestar general.
Existen muchas canciones que ayudan a aprender a sumar o las tablas de multiplicar o a aprender segundas lenguas, y los chicos disfrutan mucho de esta y otras manifestaciones artísticas.
A los niños un poco más grandes (a partir de 10 años) les apasionan los crucigramas, las sopas de letras, adivinar frases ocultas o quien es el personaje que otro niño está representando (esto último es muy útil para las clases de Historia).