La importancia de ser un alumno organizado

Organizarse en cualquier acción que realicemos es muy importante en vistas a la consecución eficaz del objetivo, por supuesto en su justa medida, ya que alguien que quiera tener todo bajo control puede transformarse en un obsesivo. En lo referente a las tareas escolares la organización comprende varios aspectos:

1. La organización del espacio donde se va a estudiar: debe ser un lugar tranquilo, luminoso, donde las distracciones estén ausentes (lo que equivale a decir que el celular o la computadora deben estar ausentes o apagados, salvo que se los use para buscar información o realizar trabajos allí).

2. La organización del material de estudio: un buen estudiante debe preparar todos los elementos que necesita para estudiar, y ordenarlos: carpetas, cuadernos, libros, lapiceras, gomas, reglas, etcétera, para no tener que estar levantándose a cada rato para buscar una u otra cosa. No podemos delegar en otro esta tarea, ya que solo quien lo va a usar sabe la mejor manera de encontrar lo que busca. Algunos alumnos son tan desorganizados que en sus carpetas tienen mezcladas las tareas y apuntes de las diferentes asignaturas, y eso dificulta enormemente la tarea. Numerar las hojas, clasificarlas de acuerdo al tipo de actividad (toma de notas, trabajos prácticos, exámenes, etcétera) colocar carátulas para separar, etcétera ayuda a ordenarse.

3. La organización del tiempo: Hacer una planificación del tiempo del que se dispone, y de acuerdo a ello estructurar horarios y plan de actividades (y por supuesto, cumplirlo) es absolutamente necesario para logar aprender.

Por supuesto que con organizarse no basta, ya que luego hay que leer, releer, subrayar las ideas principales, hacer cuadros sinópticos y comparativos, ejercitarse, tratar de exponer oralmente y/o por escrito los contenidos, simulando una evaluación, etcétera, pero si previamente no nos organizamos nos será mucho más difícil.