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Historia de la Educación Argentina

Publicado por Hilda Fingermann

Desde mediados del siglo XVI y hasta el siglo XVIII fueron las órdenes religiosas las encargadas de impartir la educación en esa región que formaba parte de las colonias españolas en América. Si bien la mayor cantidad de escuelas fundadas fueron primarias, en 1613 la Universidad de Córdoba nacía para brindar a la población capacitación universitaria. La educación religiosa fue cediendo de a poco paso a una concepción más práctica siguiendo las nuevas ideas nacidas con la ilustración europea del siglo XVIII.

En 1810 se produjo la Revolución de Mayo y en 1816 se declaró la independencia de la República Argentina, nacida como estado soberano, adoptándose en educación un método conductista, rígido, memorístico, y el sistema lancasteriano, que abarataba el costo en sueldos docentes, al utilizar a alumnos más avanzados para enseñar a sus compañeros.

La Constitución Nacional de 1853 consagró el derecho de enseñar y aprender que quedó en manos de las provincias, que fundaron escuelas provinciales que coexistieron con las nacionales, como el nacional Buenos Aires, fundado en 1864, y a instancias de Sarmiento, las escuelas normales.

Un hito en la educación argentina lo marcó la sanción de la ley 1420 en 1884, que consagró en el país la educación gratuita, obligatoria y laica. La escuela fue el lugar donde los hijos de los inmigrantes recibían los conceptos patrióticos que los incluiría como integrantes de la nueva nación adoptada por sus padres, y que ellos sentirían como su terruño, haciendo lazos de hermandad entre descendientes de españoles, italianos, alemanes, suizos, etcétera.

En 1943 durante la presidencia de facto de Pedro Pablo Ramírez se incluyó la educación religiosa en las escuelas.

Durante los gobiernos peronistas (1946-1952 y 1952-1955) se amplió la matrícula en los colegios y se produjo el acceso de la clase media a la enseñanza secundaria y superior. En 1954 se suprimió la enseñanza de religión en los colegios públicos. Se utilizó la educación para construir en los niños una visión política favorable al gobernante y su esposa, Eva Perón.

Desde mediados del siglo XX se desarrolló la enseñanza técnica basada en el nuevo modelo de educación para el trabajo, introduciéndose a partir de 1960 las ideas pedagógicas de educar para la liberación de las clases oprimidas. Sin embargo las dictaduras que afectaron al país hirieron profundamente las políticas educativas que se volvieron coactivas, represivas y verticalistas.

En 1983, fue electo Raúl Alfonsín para comenzar una nueva etapa, esta vez de consolidación definitiva de la democracia.

En 1993 se dictó la Ley Federal de Educación, número 24.195, que si bien tuvo muy sanas intenciones, y en la teoría significaba una reestructuración curricular valiosa no fue acompañada por capacitación docente adecuada y por infraestructura acorde, además de que primarizó la enseñanza de los adolescentes. La ley preveía una educación general básica de seis años iniciales (primer ciclo de la EGB) y tres años siguientes (segundo ciclo de la EGB) donde las asignaturas de ciencias se distribuyeron por áreas (Ciencias Naturales y Ciencias Sociales) lo que obligaba por ejemplo a un profesor de Historia dar clases además, de Geografía y viceversa; y tres años de educación orientada a determinadas modalidades: Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, y Economía y Gestión de las Organizaciones,

Ante el fracaso de este sistema se sancionó en el año 2006 una nueva Ley de Educación, que se halla vigente, número 26.206, que estableció la ecuación inicial a partir de los tres años, siendo obligatoria desde los cinco años, igual que constaba en la ley anterior, pero como novedad, estableció la EGB (Educación General Básica) de 6 años de duración pero creó luego la ESB (educación secundaria básica) ahora dependiente de las escuelas medias, que comprende primero, segundo y tercer año y que continúa con un ciclo superior orientado al que se le agregaron nuevas modalidades, de tres años más (cuarto, quinto y sexto año).