Embarazo en la escuela
El embarazo adolescente afecta la problemática escolar en dos sentidos: para prevenirlo, debiendo ser tratado en las materias específicas (por ejemplo “Salud y adolescencia” o Sociología”), ya que si bien tener un hijo es una bendición, implica un gran desafío de madurez y dedicación para el cual se requiere contar con estabilidad emocional y económica (obviamente que esto no se da tampoco entre toda la población adulta, pero en la adolescencia el problema es general) y como contenido transversal; y el otro aspecto, como realidad, acompañando a las niñas madres en el difícil proceso de seguir formándose integralmente ellas mismas como personas, y al mismo tiempo como responsables de un futuro ser que albergan en su vientre, y al que deben cuidar cuando ya ha nacido.
Las embarazadas en las aulas ya no son un hecho que cause sorpresa, aunque sí preocupación. ¿Antes no las había? Sí, pero en general abandonaban sus estudios. Hoy, por suerte, con otra mirada social de más aceptación, las chicas se animan a mostrar en general con orgullo, su futro bebé, y aunque sin dudas será un camino difícil por la inmadurez lógica de sus pocos años para enfrentar tanta responsabilidad, no se sienten juzgadas, sino acompañadas.
La Ley de Educación Nacional en Argentina contempla ambos aspectos. El primero en el artículo 11 inciso p) donde establece entre los fines del sistema educativo educar en una sexualidad responsable. Con respecto al segundo, el artículo 81, establece como deber de las autoridades jurisdiccionales, tratar de que las jóvenes embarazadas ingresen y permanezcan en el sistema escolar, y continúen sus estudios luego de convertirse en madres. Obliga a las escuelas a contar con salas de lactancia y en caso de ser necesario, por riesgos o complicaciones físicas, que las niñas embarazadas o madres se incluyan en la educación domiciliaria y hospitalaria. Este mismo artículo remite a la ley 26.061 de protección integral de la niñez y adolescencia, que en su artículo 17, prohíbe discriminar por embarazo, por maternidad o por paternidad.